Conocer las experiencias de los administradores no sólo en Santiago, saber sus dificultades y logros, es una posibilidad de compartir aprendizajes y enseñanzas. Por eso, en esta oportunidad profundizaremos en el Blog de Edifito, la historia de Glenda Gutiérrez Araya, administradora de edificios y condominios de la ciudad de Calama, región de Antofagasta.
Glenda comenzó acercarse a este rubro cuando trabajaba de asistente de post venta de una inmobiliaria en Calama. Ahí comenzó a relacionarse con el proyecto inmobiliario del que después sería la administradora. En esta etapa aprendió el funcionamiento de un edifico y la relación de vida en comunidad, obtuvo conocimientos directamente de la Inmobiliaria ella misma afirma que “en la inmobiliaria se encontró con personas muy buenas y aprendió de administración”. Este proyecto comprendía dos torres y ahí empezó a entender lo que significaba un edificio.
Glenda es de Ovalle, partió trabajando en La serena en una cadena de Supermercados, hasta que decidió trabajar en Santiago. En ese periodo tenía que buscar un mejor bienestar para ella y sus dos hijos. De ese comienzo ya han pasado 15 años, donde partió trabajando en el retail. En Santiago estuvo por 8 años dedicada a lo mismo. Comenzó siendo cajera en una cadena de supermercado y logró convertirse en jefa de local. Hasta que por su marido llegaron a vivir a Antofagasta y luego, el 2012, se trasladaron a Calama. Ese año encontró el trabajo en la inmobiliaria. Cuando se acabó la construcción del proyecto en Calama le ofrecieron administrarlo el 2 de enero del 2013.
El 2012 llegó a trabajar a la comunidad edificio “Santiago” en Calama. “Ahí conocí a la mayoría de los propietarios, porque era yo misma las que les entregaba los departamentos cuando los compraron. Es un edificio de 96 departamentos y de 9 pisos”, comenta. Luego el 2014 comenzó con el edificio “Torre Central” de 8 pisos, 48 departamentos y 3 locales comerciales, en esta comunidad la mayoría son arrendatarios agrega la administradora.
Glenda Gutiérrez estudió técnico en administración de empresas. Posteriormente hizo curso de administración de edificios, además agrega que curso o capacitación que le ofrecen, las toma, para perfeccionarse lo más que pueda.
Entre el 2011 y 2012 fueron los primeros edificios en Calama que se levantaron. En cuanto a la importancia del rol del administrador de edificios y condominios en esta ciudad del norte, Glenda cree que “este rubro es nuevo en Calama, acá se veía más en condominios de casas. Pero es un rol importante, hay que estar presente en todo lo que tiene que ver con el edificio, incluso para ayudar a los mismos propietarios, para administrar hay que tener bastante disponibilidad y carácter”.
Lo más difícil de ejercer la administración en la ciudad de Calama es que “la gente acá es súper difícil, porque sienten que te pueden sacar cuando quieran. Este trabajo tiene una buena parte ingrata, ya que muchas personas sienten que no le das en el gusto, pero hay otras que sí valoran tú trabajo. Si yo quiero que me respeten también yo respeto a los demás”. Además agrega que dentro de su gestión otra gran dificultad es que “en Calama todo es caro, las mantenciones encarecen mucho los gastos comunes.
Ahora están llegando más empresas y hay más ofertas, por eso creo que pueden empezar a bajar los gastos comunes”. Eso dificulta no sólo la gestión sino también las relaciones. Respecto a este punto, Glenda señala: “cuesta que las personas entiendan que para mantener las garantías hay que realizar las mantenciones, y hay que entrar a explicarles esto. Además que mucha gente compra por inversión, y estas personas no piensan que las mantenciones se deben realizar cada cierto tiempo. Pero he ido formando conciencia en los propietarios al respecto”. A su vez agrega, en relación a este mismo tema, que “también encontrar empresas certificadas cuesta, pero ahora que hay más proyectos de edificios, a las empresas les conviene quedarse en Calama. Por ejemplo los servicios básicos son más caros, el agua y el gas, aunque la energía es más barata”.
Dentro de sus logros, Glenda Gutiérrez relata que ha podido llegar a acuerdos con los propietarios incluso en las Fiestas de Navidad con los niños, “la idea de festejar la Navidad vino de una propuesta que le hice a la comunidad, llevamos todo armado para que la comunidad dijera que sí, y así fue”. De esta forma, Glenda cuenta que como “acá la gente es más apática y no es tan cálida, para la fiesta de Navidad los papás se unen, como comunidad, y eso ha sido muy especial”.
Pese a que ya se ha acostumbrado, a Glenda no le deja de llamar la atención la personalidad de los calameños, ya que según afirma, “las personas son más apática porque la población en su mayoría es flotante, vienen solo a trabajar y luego se van, por lo tanto la convivencia es otra. Cuando viví en un edificio en Santiago la gente toda se conocía y se saludaba”. Pero dentro de las dificultades ha logrado abrirse camino en el mundo de la gestión administrativa y para ella “lo más gratificante es cuando las personas te manifiestan cariño y reconocen tu trabajo. Además que dan buenas referencia del trabajo que se hace”.
Glenda agradece a las comunidades que la han acogido y han confiado en su trabajo: Comunidad Edificio Santiago, Complejo Edificios Espacio Parque, Edificio Eduardo Abaroa II, Condominio Parque Balmaceda Sur, Complejo Plaza Sol Calama y a todas las personas que han apoyado su gestión, para ella es importante resaltar este agradecimiento, porque han sido parte de su aprendizaje y de haber escogido el camino de la gestión administrativa. Hoy conocimos la historia de Glenda en el Blog de Edifito y cómo se transformó en administradora de edificios y condominios.
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